Esta mañana despidieron a alguien en el curro.
Al llegar al aparcamiento de la empresa, la despedida pensó que los neumáticos del coche de cierto cargo directivo estaban muy gordos... y les hizo una "liposucción".
Cuando la "cirujana" volvió por la tarde a recursos humanos a recoger los papeles que le faltaban, le comunicaron que las cámaras del párking lo habían grabado todo e iban a denunciarla.
Una risa nerviosa fué su única respuesta, y desapareció rápidamente.
No lo pensamos dos veces antes de hacerle la putada a nuestro ex-jefe, aunque si nos pillan tenemos todo en nuestra contra. Pero nos aterroriza exigir lo que es nuestro, pidiendo una inspección de trabajo, denunciando un despido improcendente, contemplando el convenio... aún sabiendo que la legislación vigente nos respalda.
Qué curioso y extraño, no tiene sentido.
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2 comentarios:
Cuanta razón tienes... y no veas la de despidos que estoy viendo en amigos por madrid (menos mal que no son en mi empresa, sino compañeras de mi novia)... Por ejemplo, despidieron a una recepcionista, porque llevaba poco tiempo, y se reincorporaba de una larga baja una auxiliar de enfermería con problemas de espalda, que llevaba muchos años allí, y pasaba a ocupar el puesto de recepción... Pero despedida de un día a otro, me acuerdo que andaba preocupada por si dos días después tenía que trabajar o no... y resulto que ni a los dos días, ni el resto de ellos...
Si es que lo primero que deberíamos recibir antes de trabajar debería ser el contrato y una copia del convenio que nos afecta; y creo que tenemos derecho a lo segundo. Así podríamos conocer, como mínimo, nuestros derechos, para luego poder reaccionar con conocimiento de causa.
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